(*) En situaciones extremas siempre hay un culpable. Así las cuestiones en si, tienen un propósito. El primero de los propósitos podría tratarse de quien «seria el culpable». En vez de ser, «seré yo el culpable»?.
El segundo podría ser: culpable yo?. Si no te diste cuenta, acá el que hace las cosas bien soy yo, así que la culpa es solo tuya.
Cuando podría ser: ambos tenemos culpas. En fin.
No nos cansamos de echarle la culpa a otro. En vez de vivir sin culpas de nadie. Ni de nada.
Somos un sin fin de boludos dispuestos a comernos entre nosotros. Viviendo con límites y sin filtros a la hora de culpar.
Sonriendo al público y ver que otro justamente hace lo mismo que vos, que yo y van a la vida y no por la vida.
Supe ver que esto de la culpabilidad esta relacionado con esto de que: quien quiere verte culpable, te hace sentir culpable.
* Por Cristian Neculman